Cosas de la Vida

El día a día presiona a muchas personas al olvido de lo que es verdaderamente importante, pasamos de un día a otro sin saber que hacer ni quienes somos realmente, no sabemos el verdadero significado de nuestro camino y mucho menos pensamos en que habrá luego de nuestra partida, las cosas de la vida material nos deslumbran y no nos dejan ver el trasfondo, y nunca nos damos a la tarea de pensar en las cosas de la vida "espiritual".
¿la Consecuencia? el desvio de nuestros compromisos, ¿cuales compromisos? los que hemos adquirido con la ley divina.
El simple hecho de estar encarnado en este mundo implica ya que tenemos alguna cosa que mejorar, cambiar o cancelar, pues la tierra, que tambien evoluciona, se encuentra en el transito de convertirse de un planeta de expiación y prueba, a un planeta de regeneración.
Este cambio evolutivo va intimamente relacionado con la condición evolutiva de los seres que lo habitan, en este caso la humanidad ha alcanzado ya niveles morales suficientes como para comenzar a hacer esta modificación general en donde los que no se compatibilicen con este cambio deberan enfrentar una emigración hacia una estación mas acorde con su estado espiritual.
¿Y los que quedan que? pues quienes queden en este mundo podran continuar avanzando en un estado distinto en donde las tendencias hacia lo material iran desapareciendo paulatinamente, y el día a día se convertira en otra cosa menos superficial y si mucho más espiritual.
Las cosas de la vida terrenal cederan el paso a las cosas de la vida espiritual, y poco a poco nos preocuparemos mas por lo que es real y abandonaremos la ilusión de la carne.
Debemos despertar, la realidad es mas amplia y mucho mas prolifica, el trafico, el mercado, las salidas a divertirnos, incluso la alimentación, seran vistos bajo una optica diferente en donde perderan importancia sobre lo que si nos debe ocupar, y esto no es otra cosa que el futuro de nuestro espiritu ante la eternidad.